Estos tiempos de pandemia y confinamiento hemos aprendido muchas cosas. Primero, que Dios participa de nuestras vidas y no hay palabras ni sentimientos suficientes como para subrayar esa bendición. Segundo, que queremos mucho a los nuestros y que la distancia no es una cuestión física sino que se rige por la intensidad del corazón. Tercero, que nuestras congregaciones e iglesias son necesarias porque no solo crecemos en Cristo en ellas sino que, además, fortalecemos vínculos de amistad sincera. Cuarto, que la educación ha cambiado de soportes pero no de ideario. Seguimos sosteniendo que “Educar es redimir” y eso quiere decir que Jesús debe mostrarse en la transversalidad de la enseñanza-aprendizaje. Vamos, que nuestros hijos deben ver en sus maestros y escuchar de ellos la Buena Nueva que nos da sentido y esperanza.
Llevábamos tiempo, antes de la pandemia, pensando en esto. Pensando en aquellas familias que no tienen la oportunidad de tener un colegio adventista en sus ciudades. Es lógico pensar que una familia adventista lleve sus hijos a Urgell (Barcelona), Timón (Madrid), CAS (Valencia) o Rigel (Zaragoza) pero, ¿y los que viven en Sevilla o en Santander o en Bilbao? También considerábamos a aquellos padres que, por circunstancias de la vida o por cuestiones económicas, no tienen acceso a esta oportunidad. Y esta molestia pandemia nos ha permitido ver la luz: LLEVEMOS LAS ESCUELAS ADVENTISTAS A CADA CASA.
Del dicho al hecho. Os estamos presentando un proyecto que nos ilusiona mucho porque va a llevar nuestro ideario a cualquier lugar gracias a la tecnología. Comenzaremos con una prueba piloto para este mes de julio. Estáis saturados de que los niños se pasen el día en el ordenador. Es cierto pero, como diría el estudiante con mejores notas de la Historia (sí, Salomón), todo tiene su tiempo. Y, mirándolo bien, mejor es una hora de clase con un profesor adventista que de un videojuego (que adoctrinan mucho más de lo que pensamos).
¡Quieres más información! Bien, nos gusta esa actitud. Primero, puedes ver este video en el que te lo explicamos todo (ESCUELAS ADVENTISTAS EN CASA). También puedes ver los detalles de este primer curso en CLASES DE VERANO. Pero no te quedes solo en la información, inscribe a tus chavales. Tendrán clases de apoyo de Matemáticas y Lengua, y de conversación de Inglés. Y… considerando esos michelines que se te han instalado en este período de confinamiento… Deporte para adultos. Sí, ya lo sabes, estamos en todo.
Es el principio de nuevas propuestas de una educación adventista en cada casa para que nuestro mensaje cale en los nuestros porque los queremos y anhelamos que compartan nuestra esperanza. Juntos vamos a propiciar que crezcan en Cristo. Nosotros hacemos nuestra parte. Ahora, necesitamos que hagáis la vuestra. ¿Contamos con vosotros? Ojalá que sí.